lunes, 18 de febrero de 2013

DIA 17. EL MALDITO DESEMPLEO





Es una lacra conocida por todos.
El paro en España esta llegando a cifras inimaginables.
Seguramente detrás del numero frio que contabiliza a cada desempleado hay un argumento digno de un guion de película.
Pero desconocemos sus historias hasta que alguien nos la pone delante de la cara como una bofetada.
O en el peor de los casos algún familiar cercano la esta padeciendo.
Este país mio tan maravilloso se esta desangrando a través de finas lineas como venas, mandando al extranjero a personas que antes vivían cómodamente en sus casas, si, esas que les están quitando los bancos.
Nos culpan de haber vivido por encima de nuestras posibilidades  de ser un país que tenía una burbuja inmobiliaria y de consumo excesivo.
Vale.
¿Y ahora que hacemos?
Los alemanes dicen que si ellos no despilfarran como los españoles, en infinitos cargos públicos, pues tampoco quieren darnos el dinero que con tanto trabajo guardan en sus arcas.
Lo entiendo.
Un plan de ahorro parece ser la solución.
Y eso esta llevando a que el bolsillo del españolito medio este vacío.
A que se prescinda de lo que no es superfluo.
En Sanidad, en Educación, en derechos sociales; un largo etcétera continuaría con una amplia lista de recortes.
Y todos tenemos miedo.
Miedo a que nos toque la lotería de los recortes a través de un despido.
Las grandes empresas hablan de que la importación puede ayudar, los pequeños empresarios cierran sus tiendas, sus bares, sus negocios, y hacen la maleta para buscar algún destino que pueda dar de comer a sus familias.
¿De verdad la culpa ha sido nuestra?
Me cuesta creerlo.
Ahora que los políticos tienen que demostrar sus habilidades para sacarnos del atolladero, muy pocos se salvan de la corrupción en algún momento de sus vidas publicas.
Instituciones como la monarquía se tambalean por el fraude y el enriquecimiento desmedido de los que lo tienen todo.
¿Quien puede poner una fecha para salir de esto?
Nadie.
Y mientras tanto nos levantamos estupefactos al poner la tele y que te cuenten como un señor que no puede pagar su hipoteca se cuelga de una cuerda en su casa, ante el horror de que lo desahucien y que su familia tenga que mendigar.
Es demasiado.
Demasiado lento, demasiado corrupto, demasiado duro ver como tu país  y todas las personas que lo componen se van por la taza del WC, sin poder parar al sujeto que esta continuamente tirando de la cisterna.
!Tienen que hacer algo, tienen la obligación de hacer algo y pronto! 
Yo soy una de las emigrantes que se fue de España antes de que empezara la maldita crisis, cuando aseguraban que a nosotros, los españoles, no nos iba a afectar, que decir que estábamos tan mal era de ser ¨malos españoles¨.
Pues desde fuera se ve fatal, y cuando vuelvo a mi amada tierra, todavía es mas fuerte comprobar en lo que se esta convirtiendo este increíble país.


Cariños.

emeka








No hay comentarios:

Publicar un comentario